Publicaciones de lucia (4)

Ordenar por

un poco mas para contar y cometar en flia

“Sólo si me siento valioso por ser como soy,puedo aceptarme, puedo ser auténtico, puedo ser verdadero”Jorge BucayNuestra sociedad es extremadamente cruel con las diferencias y exige un ideal estético y existencial inalcanzable para la mayoría, simplista, excluyente, equivocado y cruel, como vimos en el cínico chiste de “¿Se nos acaban las pilas?”.Todos tenemos un lugar en el mundo y una misión de vida, aunque nos cueste verla y entenderla.Este cuento anónimo hindú es la mayor lección que podemos aprender y nos deja una gran moraleja que es necesario aplicar a nivel colectivo:Un aguador de la India tenía sólo dos grandes vasijas que colgaba en los extremos de un palo y que llevaba sobre los hombros. Una tenía varias grietas por las que se escapaba el agua, de modo que al final del camino sólo conservaba la mitad, mientras que la otra era perfecta y mantenía intacto su contenido. Esto sucedía diariamente.La vasija sin grietas estaba muy orgullosa de sus logros pues se sabía idónea para los fines para los que fue creada. Pero la pobre vasija agrietada estaba avergonzada de su propia imperfección y de no poder cumplir correctamente su cometido. Así que al cabo de dos años le dijo al aguador:Estoy avergonzada y me quiero disculpar contigo porque debido a mis grietas sólo obtienes la mitad del valor que deberías recibir por tu trabajo.El aguador le contestó: “Cuando regresemos a casa quiero que notes las bellísimas flores que crecen a lo largo del camino”Así lo hizo la tinaja y, en efecto, vio muchísimas flores hermosas a lo largo de la vereda; pero siguió sintiéndose apenada porque al final sólo guardaba dentro de sí la mitad del agua del principio.El aguador le dijo entonces: “¿Te diste cuenta de que las flores sólo crecen en tu lado del camino? Quise sacar el lado positivo de tus grietas y sembré semillas de flores. Todos los días las has regado y durante dos años yo he podido recogerlas. Si no fueras exactamente como eres, con tu capacidad y tus limitaciones, no hubiera sido posible crear esa belleza. Todos somos vasijas agrietadas por alguna parte, pero siempre existe la posibilidad de aprovechar las grietas para obtener buenos resultados.MORALEJA:La uniformidad de la población es un absurdoLa tiranía de la estética nos ha hipnotizado hasta el punto de que España es el 2º país mundial en cirujía estética y las mujeres desperdiciamos nuestro talento y energía en batallas inútiles, caras y desgastadorasLas metas globales del adosado, el 4×4 y el colegio privado o su equivalente en status (tunear el coche, viajes exóticos, gadget tecnológicos, etc.) nos ha endeudado por encima de nuestras posibilidades y de la sensatez, esclavizándonos al Sistema en cuerpo y alma, cuando muchos solo queríamos un trabajo sencillo, componer música, hacer collares, oler las flores, o ver crecer a nuestros hijos felicesEl 95% de los bebés diagnosticados con sindrome de Down son abortados en España porque queremos “NIÑOS PERFECTOS”Los discapacitados, y muchos capacitados, se perciben como vasijas estropeadasDefinitivamente, los sinverguenzas de Wall Street no son los únicos que han perdido el norte y estamos ante una crisis de conciencia general en la que todos tenemos que hacer nuestro propio examen de valores interior.A partir de hoy empezamos una nueva serie titulada “Discapacidad y poder” con decenas de historias de personas discapacitadas o “imperfectas” a ojos de los demás, como la atípica modelo Debbie van der Putten, que con su ejemplo y coraje demuestran que las supuestas grietas pueden ayudar a construir un mundo mejor y que todos tenemos un asiento en este teatro.La Vida es mucho más de lo que nos han contado.Los que no tenemos grietas por fuera podemos tomar buena nota de todos ellos.Vía: La posada de SerennaFoto: Galería Elsa A. Pérez
Leer más…

lilas

Hinduismo 2. Así como el fuego es necesario para cocinar, así entre todas las varias formas de disciplina sólo el Conocimiento es el medio directo para la Liberación: sin el Conocimiento no puede haber Liberación. 3. La acción no puede destruir la ignorancia ya que no se opone a ella; sólo el Conocimiento puede destruirla ignorancia como la luz disipa la oscuridad.6. El mundo del devenir, caracterizado por el apego, la aversión, etc., es en efecto similar al sueño: parecereal mientras persiste, se revela irreal al despertar.8. Desde el sustrato universal cuyo supremo Señor es la primera causa, los mundos surgen, existen y se disuelven como las burbujas en el agua.66. El alma individual consumida por el fuego del Conocimiento provocado por la audición (la reflexión y la meditación), al librarse de todas las impurezas resplandece por sí sola como el oro que brilla. (Samkara: Atmabodha. del libro "La esencia del Vedanta")Hinduismo y Vedanta
Leer más…

lila para niños y para el niño que llevamos dentro

Cuento hinduEl encantador de serpientesRaj vivía en una casita blanca cerca del río Ganges con su esposa, Akba.Eran muy pobres, pero felices.Raj se ganaba la vida de encantador de serpientes. Todas las mañanas caminaba a la plaza del pueblo con su flauta, su esterilla y la serpiente venenosa en una vasija. Al llegar, desenrollaba la esterilla, se sentaba, destapaba la vasija y empezaba a tocar la flauta.Las gentes se acercaban a mirar.La serpiente iba sacando lentamente la cabeza de la vasija, contoneándose al ritmo de la música. Como sabían que era una serpiente muy venenosa, siempre echaban monedas sin acercarse demasiado.Al caer la tarde Raj dejaba de tocar. La serpiente desaparecía dentro de la vasija; Raj ponía la tapa, enrollaba la esterilla y, con la flauta bajo el brazo, regresaba a su casa.Una noche, después de cenar, Raj le dijo a su esposa: "Akba, mañana voy a ir a la ciudad; allí podré tener más público y ganar más dinero".Raj partió al amanecer. Llegó a la ciudad, se sentó en el mercado y empezó a tocar la flauta: al punto la serpiente salió de la vasija bailando al compás y un gran gentío se congregó a su alrededor. Entre risas y aplausos, le arrojaron montones de monedas de oro. Raj nunca había visto tanto dinero en su vida.Al anochecer, Raj reunió todo el oro, recogió la vasija, la esterilla y la flauta, y corrió a casa.No se dio cuenta que había tres ladrones observándole. "Ese encantador de serpientes tiene un montón de oro. Vamos a robárselo", masculló uno de ellos. Y siguieron a Raj hasta su casa.Raj mostró a Akba el oro que le habían dado en el mercado. Se puso contentísima: "¡Somos Ricos! Comeremos en abundancia y podremos comprarnos ropas nuevas", exclamando abrazando a Raj. Después metió el oro en una gran vasija: "Mañana buscaremos un sitio seguro para esconderlo", dijo sin darse cuenta de que los tres ladrones la espiaban desde la ventana.Aquella noche, cuando ya se habían acostado, Akba oyó un ruido fuera de casa. "¿Qué ha sido eso Raj?", preguntó alarmada. "Será un perro callejero, duérmete", contestó Raj entre bostezos. "Estoy preocupada por el oro", dijo Akba. Se levantó de la cama y recogió la vasija de oro. Pero al ver la vasija de la serpiente, pensó: "Esta es igual de valiosa, gracias a la serpiente hemos ganado todo ese oro", y subió ambas al desván, pensando que allí estarían más seguras. Luego regresó a la cama y se quedó dormida.Fuera, los ladrones cuchicheaban entre ellos. "Esa tonta ha puesto el oro en el desván", dijo uno de ellos. "Tendremos que subirnos unos a los hombros de los otros para llegar a la ventana", dijo otro. "Yo soy el más pequeño.Me subiré encima de los otros dos, me colaré por la ventana y os pasaré la vasija".Intentando hacer el menor ruido posible, los ladrones llevaron a cabo su plan.El ladrón más pequeño se apoderó de la vasija, y todos se apresuraron a regresar a su guarida."¡Somos ricos, somos ricos!", celebraban dando brincos.Uno de ellos levantó la tapa de la vasija para mirar el dinero, pero en lugar de oro se encontró una serpiente venenosa."¡Sálvese quien pueda!", gritó. Los tres ladrones se asustaron tanto que salieron disparados de su guarida, camino del bosque, y nunca más se los volvió a ver.A la mañana siguiente, Raj subió las escaleras para llevar de nuevo la serpiente a la ciudad. "Aquí sólo hay una vasija", dijo llamando a Akba. "Alguien ha debido montar la otra". Akba levantó la tapa de la vasija y miró dentro.Estaba lleno de oro. "¡Han robado la vasija equivocada, vaya sorpresa se van a llevar!", rió Akba.Raj desenrolló la esterilla fuera de la casa, se sentó y empezó a tocar la flauta. Al poco rato, la serpiente se acercó zigzagueando. Raj la recogió y la metió en la vasija, todo listo para una jornada.
Leer más…

lilas para niños

Este cuento no es de mi invención. Me lo contaron asegurando que disfrutaría mucho con él y que de su aparente simpleza se podría desprender tanta enseñanza como estrellas puedan contarse en el firmamento. Pertenece a la tradición oral hindú, y ahora yo lo comparto con vosotros en forma de palabra impresa:Un día el amante decidió ir a casa de la amada a buscarla. Cuando llegó, llamó a la puerta: toc, toc, toc. La voz de la amada llegó desde el interior: «¿Quién eres?». El amante, orgulloso y seguro de su condición, respondió con seguridad: «Soy yo», y esperó paciente a que la puerta se abriera, pero en vez de eso la puerta permaneció cerrada y aquel día no volvió a oír la voz de la amada.El amante volvió a su casa extrañado de que la puerta no se hubiese abierto, pero pensó que tal vez la amada no se encontraba bien y que si lo volvía a intentar al día siguiente, la puerta se abriría. Y así lo hizo un día después; el amante regresó a la casa de la amada y, muy convencido, llamó a la puerta: toc, toc, toc. Como el día anterior, oyó la voz de la amada que decía: «¿Quién eres?» Y el amante respondió: «Soy yo», pero la puerta no se abrió.Fue entonces cuando, abatido, el amante partió al desierto para meditar e intentar descubrir por qué razón la amada no le había abierto la puerta. Después de pensar y pensar, la soledad le dio la respuesta y fue apresuradamente a casa de su amada. Esta vez llamó: toc, toc, toc, y, como las otras veces, la amada preguntó: «¿Quién eres?»; esta vez el amante respondió: «Soy tú», y la puerta se abrió.
Leer más…

contador visitas gratis