" El duelo Infantil : El niño y la muerte








La pérdida de un ser querido, en este caso un abuelo, es un momento difícil para toda la familia, pero para los niños es muy impactante, sobre todo si tenían un contacto muy estrecho con
esa persona. Los abuelos desempeñan un papel casi mágico en la infancia
de los niños. Son padres al cuadrado, portadores de un amor
incondicional y su único objetivo es amar, disfrutar y vivir una nueva
infancia al lado de su nieto.
 
Para algunos niños los abuelos se convierten en un ancla de seguridad, en uno de los vínculos afectivos más fuertes para su autoestima y cuando
el abuelo fallece lo peor que podemos hacer es intentar evitarles el
sufrimiento con mentiras piadosas.
 
En cualquier caso, podemos hablarle sobre el ciclo de la vida de una forma natural, por ejemplo, haciéndole observar como algunas plantas se
marchitan. Si tienes mascotas podrá ver como se hacen mayores o,
incluso, cómo un día han dejado de moverse.
 
De esta manera, el niño se va aproximando del tema de la muerte de forma natural y la muerte de un ser querido le dolerá, pero no le causará traumas mayores. Como dijo el poeta Carlos Drummond de Andrade:


“El dolor es inevitable, el sufrimiento opcional”.
 
La muerte es la única certeza que tememos en esta vida, si la complicamos con historias, cuentos e inseguridades adultas, los niños no
conseguirán superar una pérdida de manera saludable.
 
 
Cómo afecta a los niños la pérdida de un ser querido
 
La pérdida de un ser querido en la etapa de crecimiento puede afectar profundamente a la autoestima infantil, ya que esta se apoya en las
figuras familiares que actúan como reflejos, como anclajes emocionales,
los niños se sienten inseguros de su mundo, se encuentran vulnerables.

El duelo no tiene un tiempo concreto; depende de varios factores, pero hay algunos elementos comunes: la tristeza, la inseguridad; han de llorar y expresar el vacio que sienten. Compartir
cómo echan de menos a la persona que se ha ido para poderlo superar. Y
cada niño la vivirá a su manera, expresando su dolor basado en las
emociones que los circunda. Las pautas principales a seguir cuando se
trata de niños son:
  • No lo engañes: tu hijo es pequeño pero tiene sentimientos y sabe que algo pasa. Y decir mentiras puede hacerlo pensar cosas malas, como si dices que el
    abuelo se ha marchado es porque no quiere estar con él.
  • Las cosas claras: la realidad no es siempre como queremos. 
  • No escondas tus sentimientos en su presencia: compártelos con él. 
  • Ayúdale a exteriorizar su pena mirando fotografías, hablando sobre buenos recuerdos.

Respeto a que conviene que el niño se despida de la persona querida que va a morir, no significa que hay que llevar a un niño de 4 años a la clínica
a ver su abuelo cuando este ya no sabe quién es. Lo que conviene, por
el contrario, es prever el momento de la despedida cuando se trata de
una larga enfermedad.
 
La manera de despedirse dependerá de la edad. Una buena idea es que el
niño escriba una carta o haga un dibujo a la persona o que envié una
carta en un globo al cielo caso la persona ya no esté entre nosotros.
Por otra parte, es recomendable no llevar a los niños pequeños a los
funerales y que hay momentos que los niños pueden obsesionarse con el
tema de la muerte. Los más pequeños parecen creer que la muerte es algo
contagioso, como las enfermedades. Hay que explicarles que eso pasa
cuando alguien es muy viejecito, para así calmarlos y evitar su
ansiedad, pues temen a quedarse solos, a no sentirse protegidos.

Fuente:
http://www.eduquemosenlared.com/es/index.php/articulos-padres/352-duelo-infantil

¡Tienes que ser miembro de E.A.C. para agregar comentarios!

Join E.A.C.

Enviarme un correo electrónico cuando me contesten –

contador visitas gratis