La razón por la que los padres deberían dejar de obligar a sus hijos a saludar con besos y abrazos.

Los recuerdos de la infancia a veces son borrosos, e incluso hay gente que no recuerda nada de cuando era peque. Pero si hay algo que TODOS tenemos clarísimo era que nuestros padres eran los jefes. Se hacía y se iba donde ellos decían, y sin rechis